Nos vamos a "levantar" las redes que la tarde anterior Isidoro y Anís "largaron", más allá de la Coelleira. A ver que suerte hemos tenido. A ver si vienen llenas de pescados. Ya hace más de 30 años de esto y raro era el día, que efectivamente, las redes venían bien cargadas. Empezaba a escasear. Hace rato que se ha hecho de día y el sol va calentándonos mientras nos acercamos a destino. No ha estado mal. Venían unas cuantas "sollas", 2 rapes, 3 Xulias, 4 o 5 abadejos, algunas fanecas, 2 bellos, una robaliza y mientras levantaban, capturaron 3 pulpos que allí estaban intentando alimentarse de los peces que estaban enganchados en las redes.
Antes de volver al puerto , en la Cova Baja, bien a resguardo, limpiamos las redes y por el camino "el vasco" y "Anís" han cocinado en un pequeño infiernillo algo de pescado para desayunar. Recién salido del mar. Fresco como el solo. Regado con un poco de vino barato. Pero está bueno y a ellos les gusta. Esta vez a mi no me toca.
No me he mareado. Soy un "marinero" veterano. Ya he salido con ellos 4 o 5 veces a pesar de mi corta edad. Volvemos al puerto y me dan un par de pescados para que los lleve a casa como botín. Y yo subo orgulloso con ellos.
En Vicedo, además del Nolo, hay otros muchos barcos. Y los recuerdo. Recuerdo el "Dos hermanos" de Boni, que solo salía por las noches a por sardinas, recuerdo la lancha de Pachurín y sobre todas, recuerdo el "S-U", el rey de los barcos de Vicedo. El más grande y quizás también el más bonito, exceptuando el Nolo claro. El barco de Pancho y de Juán y de otros más.
Recuerdo que las conocíamos todas. Hasta por el ruido de sus motores. Las queríamos.
Después ya vino la "María Cima", la lancha de los Cid Maceiras. En ella pasamos grandes aventuras con corta edad aunque ya rondaríamos los 15 o 16 años. A Salva se la dejaban y Salva nos llevaba aquí y allá por la ría. Y de vez en cuando nos dejaba el timón para que uno u otro la guiáramos. Nos sentíamos importantes. Y nos bañábamos en Vilela, o en Xilloi o en la Area Longa. Cuantos días maravillosos.
No puedo terminar sin pasar por la "Solana". Nuestra querida "Solana". La lancha familiar. Pasamos unos buenos años con ella. Llena de gente. Casi llegamos a doblar la Estaca aún poniendo en riesgo nuestras vidas. Pero no lo sabíamos. Inconsciencia. Íbamos felices en ella.
A la "Solana" la tengo allí enmarcada en "Las pardelas" en Vicedo. Y la llevo en mi corazón. Como al "Nolo", y al "SU", y al "Dos Hermanos" y a la "Pescadería" y a la ´"María Cima" y ......
Todavía no sabía lo mucho que iba a querer a los pájaros. En concreto a las aves marinas. Y seguro que me cruzaba con pardelas y que allí a lo lejos, más allá de la Coelleira un págalo pasaba, me miraba y se sonreía. Yo no lo sabía pero ellas si.
Y las lanchas de Vicedo también.....
Soy de Vicedo y me ha encantado este "relato". Muchas gracias por recordarme a tantos que ya no están y tantos momentos que ya no pueden repetirse. Seguramente habremos coincidido siendo chavales en el Caolín, o en Xilloy, o en... En cualquier caso muchas gracias.
ResponderEliminarHola Jose,
ResponderEliminarMe alegro de que te haya gustado. Seguro que nos conocemos, como poco de vista. Tengo 45 años y este verano será el 46 yendo al Vicedo. Madrileño del puerto, uno de los hijos Hilda.
Si nos localizamos, ya nos tomaremos una cerveza a la salud de esos a los que te refieres.
Un abrazo.
Alfonso
Hola, Foncho.
ResponderEliminarSoy el primo de Salva, Fernando. Nos vimos este verano (alquilé el bungalow pegado a vuestra casa) y, hace poco, en Los Cruces. He llegado a tu blog de casualidad, buscando fotos de chalanos. ¡Manda carallo!
Y me alegro mucho de haberlo visto. Nos veremos por aquí.
Un saludo.
Abusando de tu hospitalidad. Tengo más entradas sobre Vicedo, pero esta vale de muestra:
ResponderEliminarhttp://unhombresentadoenunasilla.blogspot.com/2006/08/camilo.html